Nuestra ciudad, Valladolid, vive estos días bajo el protagonismo de la Semana Internacional de Cine, que cumple su 60 edición. Y nos hemos encontrado dos detalles relacionados con el flamenco. Uno es la presencia de Esperanza Fernández en el documental, Playing Lecuona, dirigido por Pavel Giroud y Juanma Villar Betancourt sobre la vida y obra del pianista Ernesto Lecuona y el homenaje que le rinden otros tres pianistas cubanos: Chucho Valdés, Michel Camilo y Gonzalo Rubalcaba, a los que se suman otros músicos como Esperanza, y también está ahí nuestro Raimundo Amador, entre otros (Hay un último pase de la película este miércoles en los cines Broadway, a las 11.45 horas. Si llegan, si están, aprovechen; habrá más oportunidades de verlo sea como sea; os dejamos el trailer, aquí).
El otro apunte flamenco tiene que ver también con un reconocido apasionado del jazz y de la música cubana, Fernando Trueba, presente ayer en la ciudad para recoger una Espiga de Honor, galardón que otorga el festival de cine vallisoletano como reconocimiento a la labor de las gentes del cine.
En la rueda de prensa ofrecida por Trueba previa a la entrega se le preguntó, ¿por qué le gusta el jazz más que el flamenco?. Recordemos que el director de cine fue el productor de Lágrimas negras, de Bebo Valdés y Diego el Cigala, y de otros discos en parecida o cercana línea a través de su sello, Calle 54.
-Es como por qué te gusta más esta chica que otra; la que te gusta te gusta. A mí el flamenco me gusta pero yo no soy nada experto en flamenco, lo he dicho mil veces, no entiendo mucho el flamenco; aunque ha habido gente a la que he admirado mucho y seguido su carrera como Morente, Paco (de Lucía), Camarón... Cualquier persona de las que conozco sabe más de flamenco que yo. En cambio el jazz si es una cosa que hace muchos años oigo, frecuento, me encuentro en mi medio cuando lo oigo, está mucho más cercano, digamos, a mi sensibilidad.".
Y ya que estamos con el flamenco y el jazz, un músico tan flamenco como 'yasero' o jazzman: Jorge Pardo, galardonado con el Premio Músicas Actuales 2015 por, “su talento como intérprete y compositor; por su capacidad para convertir el instrumento en voz poética; por establecer puentes entre la tradición hispana, sobre todo flamenca, con otras músicas del mundo, terreno en el que ha obtenido un amplio reconocimiento internacional”, ha expresado el jurado que además destaca, “el magisterio e inspiración que supone para las nuevas generaciones de músicos”. Enhorabuena, y que seguimos disfrutando de su arte.
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