-Tengo una orden de arresto contra ti, buen mozo
-¿Puede decirme, mi alférez, qué he hecho yo?
-¿Cómo quieres que sepa lo que habéis hecho todos los rojos de la Facultad? ¡Tira para el camión!
Pablo Uriel (Gómara, Soria, 1914- A Coruña, 1990), recién licenciado en Medicina es detenido y enviado a la Academia Militar de Zaragoza, su ciudad natal, convertida en prisión, a principios de la Guerra Civil española, donde permanecerá entre los meses de septiembre y noviembre de 1936.
Los presos de la Celda 14:
-Me llamo Pablo Uriel, tengo 22 años y soy médico desde hace sólo 3 meses, Vivo aquí, en Zaragoza con mi padre y hermanos.
-Yo soy Luis. Tengo 23 años y soy Licenciado en Letras. Vivo en Zaragoza y espero salir de aquí para ser un buen bibliotecario.
-(Sargento Sangrós) Yo soy Ricardo. Tengo 34 años y en mi vida civil soy contable. Estoy soltero y vivo con mi madre, que ya es muy mayor. Yo soy la única familia que tiene... así que imaginad el sufrimiento de la pobre mujer.
-¿No será usted esa voz prodigiosa que canta por las noches?
-Bueno... estoy muy solo, ¿sabe usted?
(Llega la noche. Tensa espera, mientras escuchan los pasos de quienes se llevan a los presos para ser fusilados).
-Ya se han ido.
-... ... ...
-¡Un poco de alegría, señores!
(Ricardo coge la guitarra y se pone a cantar)
Yo he conocido a una mujer
Yo he conocido a una mujer
que su marido hacía sufrir
porque le dio por suponer
que la noche era para dormir.
Baila, baila, baila,
la danza del amor
que el que no la baila,
se pierde lo mejor.
A una muchacha yo besé
y a su mamá fue a contar.
Llegó la madre y hace un mes
que no me suelta la mamá.
Baila, baila, baila,
que es hora de de bailar.
La ocasión que pierdes
no vuelves a encontrar.
(En otro momento)
-Ricardo, ¿por qué no nos canta unos fandangos como los de antes?
(Carta de Uriel a su familia: "Cuando no cantamos flamenco, cantamos las 40 en épicos duelos a guiñote con esa baraja de fabricación casera...")
Vuelve la ronda del 'paseillo', llega a la puerta de la celda 14:
-¡Prisioneros pónganse en pie! ¡Sargento Sangrós, acompáñame!.
-(Ricardo a sus compañeros de celda) Si alguno de vosotros consigue salir de aquí, no dejéis de ver a mi madre. Decidle que sólo lo siento por ella.
Tras la partida, Pablo Uriel tumbado en la cama abraza la guitarra de Ricardo: "Yo siempre había creído que el ejército era una institución seria y comprometida en el cumplimiento de sus ordenanzas, pero estos hombres salen de una prisión militar y desaparecen".
(Antes de ser encarcelado, Uriel se encuentra con uno de los profesores de su Facultad, éste, Minuesa, le comenta: "Le parecerá increíble, pero pienso que estamos asistiendo, en esta ciudad, a un experimento de psicología colectiva: El terror actuando sobre una comunidad. Parece que el terror, siempre que se ejerza con frialdad, con la suficiente intensidad y con la máxima brutalidad, produce, en la colectividad castigada, una abyecta conformidad, un sentimiento de gratitud degradante por parte de aquellos miembros de la comunidad que hayan conseguido escapar al castigo. El terror es como una gangrena que nos degrada a todos, a los verdugos los hace sádicos; a las víctimas, pasivas; a los espectadores, nos hace cómplices. El terror es el arma de moda en estos tiempos").
Pablo Uriel, gracias a la constante mediación de sus hermanas -un hermano suyo sería fusilado por el bando golpista- es puesto en libertad el 19 de noviembre de 1936, con la obligación de incorporarse a su compañía.
En nuestro afán por recoger aquello relacionado con el flamenco encontramos Un médico novato (Sins Entido, 2013) novela gráfica escrita y dibujada por Sento, un veterano de la historieta, unas referencias de las que dejamos constancia (y por que nos gusta e interesa el medio y el tema; queda por saber si esas letras son de fandangos o qué tipo de fandangos son). Un cómic recomendable basado en un momento de la vida de Uriel, ampliada en su libro autobiográfico, No se fusila en domingo (Pretextos; Valencia, 2005), narración de su experiencia durante la guerra (En este enlace, más información sobre Pablo Uriel).
(El cómic se puede encontrar en la Biblioteca Pública de Valladolid).
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.