Charla con José Salinas, antes de su recital, hoy domingo, en las XI Jornadas Flamencas de Valladolid

Prosiguen las XI Jornadas Flamencas 'Ciudad de Valladolid', hoy domingo, con un recital del cantaor José Salinas (19.30 horas; Sala Concha Velasco, del Lava. Entrada: 7 euros).

Estará acompañado por John Haddad el Amir (guitarras), Josemi Garzón (bajo) y Kike Terrón (percusiones). Tres músicos bien conocidos en el ámbito flamenco y en el de otras músicas, como se puede comprobar pinchando en sus nombres. Los tres participaron en la grabación de Tierra de luz, el debut discográfico de José Salinas -El Amir, además, productor- y suelen ser los acompañantes habituales en los conciertos que ha venido ofreciendo el cantaor desde la publicación del disco, a finales del año pasado, y que ya hemos comentado por aquí. ¿Qué ha pasado desde entonces?

"Distintas fases. Salió el disco, la verdad que muy bien, con buena aceptación. Hemos estado en ocho ciudades de España, a nivel de teatros grandes, y la respuesta muy bien. Ha sido como una primera base, hemos puesto como unos cimientos -yo tampoco sabía muy bien como iba a funcionar porque era la primera vez que lo hacía (realizar una gira propia con grupo, con disco)-, que ahora están dando un fruto. Y empieza a llamar gente que ha visto esos conciertos, cuál es la propuesta, la presentación; y empezamos a entrar en distintos festivales. Vamos a hacer este (Jornadas), me acaban de llamar del Teatro Principal de Zamora. Empiezan a salir cosas, como queríamos, siempre dentro de un entorno flamenco, donde el público que va demanda algo que conoce".

Nacido en Almería, allí surge su afición al flamenco y su deseo de hacerlo, que le conduciría a Madrid donde viviría una larga etapa -16 años- y entra en lo profesional; hasta que viene a recalar, a vivir en esta ciudad, en Valladolid, su lugar actual de residencia desde hace varios años (de esto dimos cuenta en otra entrada de este blog).

John Haddad El Amir, mano derecha de José Salinas.

"Nos hemos encontrado un público agradecido, sinceramente, que ha estado entregado. Aquí, en Valladolid, fue el primer concierto de la gira y nos quedamos muy sorprendidos. El teatro (Cervantes) estaba lleno, la gente tuvo una respuesta increíble; de hecho, pasé una hora y media firmando discos cuando acabó el concierto. Era gracioso porque la gente gritaba '¡esto tenía que estar en el (Teatro) Calderón!' (una crónica de ese concierto, aquí). Yo decía, joer, no llevo mucho tiempo aquí, la gente no me conoce tanto y esa acogida... luego lo hablábamos cenando, con los músicos, qué bueno, que buen rollo, que impulso más bueno nos va a dar esto. Y en el resto de sitios que hemos ido, también. Barcelona fue espectacular; en Tarragona estaba la sala también casi llena...". 
"El disco está pensado para la gente que le gusta el flamenco. Dentro del concierto hacemos una parte más flamenca, tradicional, y luego una parte más abierta. Está pensado para ese público que, a lo mejor, le gusta el flamenco, pero no está acostumbrado a sentarse a escuchar una media granaína, una malagueña, una seguiriya, y quiere un abanico de cosas. Y ese es el público que nos hemos encontrado, gente con ganas, con buena actitud, de todas las edades, porque es verdad que había desde gente muy joven hasta gente mayor. Entre el público, mucha gente que quiere abrir esa puerta o esa ventana al flamenco, y que cuando le das algo que suena a flamenco, porque viene desde lo flamenco, pero que es un poquito más fácil de digerir al principio, pues lo agradecen".

Proyectos: "Hay una cosa muy interesante, pero de la que no se puede hablar mucho de momento, pues está un poquito por concretar; aunque ya me han llamado (Tiene que ver con una noticia ya publicada sobre una producción -¿película?- entre la Casa de la India y el Teatro Calderón de Valladolid). Este próximo viernes tendré un primer encuentro con los organizadores. Creo que va a ser un proyecto gordo y muy interesante... Mientras, sigo con mis cosas. Estoy preparándome mi repertorio tradicional, estudiando muy en serio para, al margen de lo que estoy haciendo con el grupo, estar en un circuito más pequeño, de peñas... Yo vengo de lo tradicional, me encanta hacer cosas diferentes como lo que estoy haciendo desde hace un tiempo, en mi casa, con máquinas, procesadores de voz, que me parece no se ha hecho nunca (Salinas explica más sobre este método -"tal vez Morente..."-, baste con esto, ya llegará el momento de hablar de ello), y creo que de ahí va a salir algo interesante... Y sigo sentándome a escuchar a Pencho Cros, a Rancapino, montarme mi malagueña bien, mi granaína, fandango... hay que darle siempre una vuelta a tu repertorio tradicional porque lo vas desvirtuando, sin darte cuenta, de tanto hacerlo... No quiero perder al cantaor sólo y la guitarra, aunque me encante tocar con músicos de otras culturas; en Estados Unidos (con El Amir) hemos estado trabajando con una cantante de música árabe y un cantante de música sefardí y hemos hecho entre todos un proyecto muy interesante, pero no quiero dejar mis cantes tradicionales, estar cada día mejor, dentro de mis posibilidades, que tengo mis límites como todo el mundo".
La charla continúa, hablando sobre el momento actual del flamenco, sus dificultades, pero también de la creatividad que no cesa, el constante fluir de nuevos nombres -"esto está más vivo que nunca, con una salud increíble, mucha gente con ganas de contar cosas muy interesantes y con un nivel muy bueno"-; sobre grabaciones y de la producción en un disco de flamenco; de Enrique Morente, del sonido -"que cuenta historias"-, de Paco de Lucía y Camarón, del Tío Borrico y la malagueña del Mellizo, de Luis de la Pica y el cante de trilla, de que está estudiando percusión del folk castellano -es percusionista-, de anécdotas con El Torta, al que acompañó durante unos años; de su 'tierra de luz', Almería... larga conversación que muestra a un artista flamenco inquieto, que ama su arte, el nuestro.
(El martes prosiguen las Jornadas, que terminarán el viernes).