Dentro de nuestra serie no flamencos opinan sobre flamenco traemos a Miguel Campello, al que con motivo del concierto ofrecido en nuestra ciudad el pasado viernes hicimos algunas preguntas, entre ellas unas relacionadas con el flamenco, que son las que traemos aquí.
De Campello se podría decir con bastante acierto que posee una 'voz aflamencada', expresión bien o malamente usada -más propio sería decir que cantan con 'acento andaluz' la mayoría, o en algunos casos gachós, agitanado- para aquell@s intérpretes que no hacen flamenco, que cantan pop (a la española; y no voy a poner ejemplos). Esa voz dio sello de distinción al grupo con el que se dio a conocer, Elbicho, grupo más cercano al rock progresivo, del que se desvinculó para iniciar una carrera en solitario, habiendo publicado tres discos (algunos de los músicos del grupo le acompañan). Sonaba auténtico Miguel Campello con esa 'voz', que aún mantiene -aunque en su último disco, Camina, a veces pierde (y suena como el cantante de Estopa)-. En la charla mantenida hizo referencia a sus gustos y escuchas musicales, Serrat, Luis Pastor, Drexler, Leño o Bjork, de ahí la primera pregunta:
-¿Escuchas flamenco?
-Sí, lo escucho. Yo escucho de la radio programas que te hablan y te informan, que me interesen. Escucho música por recomendación de algún colega; hace poco estuve escuchando a Soleá Morente. Con los libros igual. El flamenco, yo creo que tengo metido un disco duro; durante un tiempo lo escuché mogollón y siempre tengo mis discos ahí en la furgo, de Camarón, del Paco de Lucía, del Morente, de mucha gente.
También puede descubrirse unas formas de flamenco en las letras de sus canciones, en cómo (d)escribe ciertas observaciones, ideas, sentimientos, pero dentro de un texto estructurado al modo de canción, que no de cante. Un ejemplo sería el de una de sus canciones más conseguidas, De los malos: "Y yo que soy de los malos / quisiera volverme bueno / pero tú tienes el miedo".
También puede descubrirse unas formas de flamenco en las letras de sus canciones, en cómo (d)escribe ciertas observaciones, ideas, sentimientos, pero dentro de un texto estructurado al modo de canción, que no de cante. Un ejemplo sería el de una de sus canciones más conseguidas, De los malos: "Y yo que soy de los malos / quisiera volverme bueno / pero tú tienes el miedo".
Aprovechando que nació en Elche, la siguiente pregunta:
-Has nacido en Elche...
-Bueno, nací en el hospital de Elche, pero me crié en Matola, que es como las afueras de Elche.
-¿Conoces a Niño de Elche?
-Sí, sí, le conozco y me han hablado muy bien de él, pero él canta flamenco flamenco.
-Ahora no, está haciendo cosas con electrónica, guitarras...
-Pues no sé, sí que me hablaron hace años de él y de que hacía flamenco puro.
-Al principio sí, pero se enfadó con los flamencos y dijo, ahora voy a hacer lo que me dé la gana.
-Sí, yo creo que al final es eso. No hace falta ni enfadarte. Cuando empecé en esto me catalogaron un poco en el flamenco fusión. Y durante un tiempo, con Elbicho, nos pusieron en la sección de jazz de las tiendas, y qué tendremos que ver con el jazz. Ya quisiera yo.
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